MÚSICA

sábado, 31 de diciembre de 2011

jueves, 22 de diciembre de 2011

FELICES FIESTAS

FELICES FIESTAS


lunes, 12 de diciembre de 2011

Osho: Si quieres aprender cualquier cosa, aprende a confiar,...

Si quieres aprender cualquier cosa,
aprende a confiar, nada más se necesita.
Si sufres,
ninguna otra cosa puede ayudarte,
aprende a confiar.
Si no encuentras sentido a la vida
y sientes que careces de significado,
nada te ayudará sino confiar.
La confianza da sentido
porque te hace capaz de permitir
que el Todo descienda sobre ti.

“Para luchar por la liberación
uno debe depender de un Gurú.
Cuando tu mente reciba sus bendiciones
la emancipación estará a tu alcance.”

¿Por qué creer en un Gurú, en un Maestro? Porque lo Desconocido está lejos de ti. Esto es sólo un sueño, a lo más una esperanza, un deseo.
Cuando me escuchas hablar del gozo beatífico, ese gozo se queda como palabra. Quizá lo desees, pero no lo conoces, ni sabes lo que es ni cuál es su sabor; está tan lejano de ti. Estás sumido en el sufrimiento y la angustia, en medio de eso empiezas a esperar, a desear el gozo; pero no servirá de nada, necesitas probarlo. ¿Quién podrá dártelo? Sólo aquél que lo ha probado puede servirte de mediador. Él puede actuar de agente catalizador. Nada tiene que hacer, basta su presencia, y a través de él lo Desconocido fluye hacia ti. Como si él fuera una ventana. Sus puertas están abiertas cuando las tuyas están cerradas y has olvidado cómo abrirlas. A través de su ventana puedes dar una ojeada al cielo.
Un maestro, un Gurú, no es sino una ventana. Uno tiene que pasar a través suyo y probar un poco. Entonces ya se pueden abrir las propias ventanas, de otro modo todo queda en palabras. Puedes leer a Tilopa. Pero a menos que encuentres a Tilopa nada te sucederá. Tu mente seguirá diciendo: “Este hombre está loco, alucinado, soñando; debe ser un filósofo, un pensador, un poeta. Pero esto no puede suceder, es imposible estar lleno de gozo”. Tú has conocido solamente el sufrimiento y las penas. Sólo has probado el veneno ¿cómo puedes creer en el elixir?
Un Maestro no es más que la personificación del gozo total. En él está vibrante. Si confías en él, sus vibraciones pueden alcanzarte. Un Maestro no es un enseñante, nada te enseña. Un Maestro no depende de doctrinas y principios. Un Maestro es una presencia. Si confías en él, está a tu disposición. Un Maestro es una disponibilidad. A través suyo tendrás el primer chispazo de la Divinidad. Entonces ya puedes continuar por ti mismo.

“Para luchar por la liberación
uno debe depender de un Gurú.
Cuando tu mente reciba sus bendiciones
la emancipación estará a tu alcance.”

Un Maestro no puede darte la emancipación, pero puede conducirte al borde de ella. La emancipación tiene que ser adquirida por ti, pues una cosa que es dada por alguien también puede ser arrebatada por alguien más. Sólo lo que es tuyo puede ser tuyo. Un Maestro no puede dártelo.
Puede únicamente bendecirte, pero su bendición es un fenómeno vital.


A través suyo puedes mirar tu futuro.
A través suyo puedes percibir tu propio destino.
A través suyo las lejanas cumbres se acercan.
A través suyo comienzas a subir como una
semilla que trata de germinar hacia el cielo.
Su bendición es agua para tu semilla.

En Oriente la bendición de un Maestro tiene un gran significado. Occidente ha permanecido absolutamente ignorante del fenómeno. Occidente conoce enseñantes, no Maestros. Los enseñantes hablan acerca de la Verdad. El Maestro te la da a probar. Un enseñante puede ser alguien que no la conoce por sí mismo, puede que la haya aprendido de otros enseñantes. Busca al Maestro. Enseñantes hay muchos: Maestros, pocos.
¿Y cómo buscar al Maestro? Muévete. Siempre que oigas el rumor de que alguien es un Iluminado, ve y permanece disponible. No pienses mucho, ama, pues a un Maestro se le encuentra a través del sentimiento. El enseñante es hallado a través del pensamiento, él es lógico en sus argumentos. Al Maestro cómelo, bébelo; escucharlo no, pues es un fenómeno vivo de energía. Si lo paladeas te darás cuenta de la diferente cualidad de su ser.
Una gran receptividad es necesaria –receptividad femenina- para encontrar al Maestro. Más si tú estás en disponibilidad ante un Maestro vivo, instantáneamente algo se enciende y quedas atrapado. Es un fenómeno de amor. No puedes probar ante nadie que has encontrado al Maestro. Cualquier prueba puede ser denegada por otros. Si lo has encontrado, tú lo sabes. Este conocimiento es del corazón, de los sentimientos.
Osho- Tantra La Sabiduría Suprema
IV La Gran Enseñanza
16 de febrero de 1975
Págs. 174,176

jueves, 10 de noviembre de 2011

Osho: The Book of Wisdom

http://oshofriendsinternational.com/index.php?option=com_content&view=article&id=69&Itemid=127

The Book of Wisdom

Osho had wanted his discourses to be published in their original form without any change or abridgement. Just a few years after Osho left his body,His words are being tampered with and indeed mutilated.

This section presents the original edition of "The Book of Wisdom" highlighting the deleted chapters, text and words in red and addition and change of words in blue
.

jueves, 3 de noviembre de 2011

Osho: El niño consiste en conceptos sentidos;




El niño consiste en conceptos sentidos; el padre consiste en conceptos enseñados, y el adulto consiste en conceptos pensados.
Y esas tres capas están luchando continuamente entre sí. El niño dice una cosa, el padre dice lo contrario, y la razón puede decir algo totalmente distinto.
Ves un plato de comida estupendo. El niño dice que comas todo lo que desees. La voz del padre dice que hay que tener en cuenta muchas cosas, como si realmente tienes hambre o si sólo estás comiendo con los ojos. ¿Es esta comida realmente nutritiva? ¿Alimentará tu cuerpo o puede resultar perjudicial? Espera, escucha, no te precipites. Y luego está la mente racional, la mente adulta, que puede decir otra cosa, totalmente distinta.
No es necesario que tu mente adulta esté de acuerdo con tus padres. Tus padres no eran omniscientes, no lo sabían todo. Eran tan falibres como tú y como tantos seres humanos, y muchas vece encuentras lagunas en su razonamiento. En muchas ocasiones te parecen dogmáticos, supersticiosos, que creen en tonterías y siguen ideologías irracionales.
El adulto dice no, y tus padres sí; el adulto dice no vale la pena, y el niño tira de ti para ir a otro sitio. Ése es el triángulo que mora en tu interior.
Si escuchas al niño, tu padre se enfada. Así que una parte se siente bien -puedes comer todos los helados que desees- pero tu padre interno se enfada; una parte de ti empieza a condenar. Y entonces empiezas a sentirte culpable. Surge la misma culpa que solía manifestarse cuando eras un niño de verdad. Pero aunque ya no eres un niño, ese niño no ha desaparecido. Está ahí, está en tu planta baja, en la base, en tus cimientos.
Si sigues al niño, si sigues la emoción, el padre se enfada y empiezas a sentirte culpable. Si sigues al padre entonces el niño se siente forzado a hacer cosas que no quiere. El niño se siente manipulado innecesariamente, y el niño empieza a rebelarse.
Cuando escuchas al padre pierdes libertad, y el niño empieza a rebelarse.
Si escuchas al padre, tu mente de adulto dice: "¡Qué tontería! Esta gente nunca supo nada. Tú sabes mucho más, estás en sintonía con el mundo moderno, eres más contemporáneo. Esas ideologías están muertas, pasadas de moda, ¿para qué te preocupas de ello?". Si escuchas a tu razón entonces sientes que estás traicionando a tus padres. Vuelve a aparecer la culpa. ¿Qué hacer? Además, es casi imposible hallar alguna cuestión en la que las tres capas se pongan de acuerdo.
Ésa es la ansiedad humana. No, las tres capas nunca se ponen de acuerdo sobre nada. Nunca hay compromiso.
Osho- And The Buddha Said
Disertaciones sobre el
"Sutra de los 42 Capítulos"
Capítulo 3, Permaneced Por Tanto Atentos
Págs. 47,48

lunes, 31 de octubre de 2011

Osho: El ser humano es una multitud,...

El ser humano es una multitud, una enorme multitud de muchas voces -relevante, irrelevante, consistente, inconsistente-, y cada voz tira de su lado; y el conjunto de todas las voces destroza al ser humano. El ser humano corriente es una confusión, de hecho es una especie de locura. Te las arreglas para parecer cuerdo. Pero en tu inteior bullen capas y capas de demencia que pueden entrar en erupción en cualquier momento, puedes perder el control en cualquier instante, porque tu control viene impuesto desde el exterior. No es una disciplina que provenga del centro de tu ser.
Por razones sociales, económicas y políticas te has impuesto un cierto carácter a ti mismo. Pero son muchas las fuerzas vitales en tu interior que están en contra de ese carácter. De hecho lo sabotean continuamente. Por eso cada día cometes muchos errores, te equivocas mucho. Hay ocasiones en las que incluso sientes que nunca quisiste hacer esto o lo otro. Pero a pesar de ti mismo no dejas de cometer errores, porque no eres uno, sino muchos.
El Buda no llama pecados a esos errores, porque al llamarlos pecados te estaría condenando. El sólo los llama fallos, equivocaciones, errores. Errar es humano, no errar es divino. Y el camino de lo humano a lo divino pasa por la atención. Las numerosas voces de tu interior pueden dejar de torturarte, de tirar de ti, de empujarte. Esas voces pueden desaparecer si estás atento.
En el estado de atención no se cometen errores. No es que los controles, sino que en un estado atento, alerta, en un estado consciente, cesan muchas voces. Sólo escuchas una, y todo lo que haces proviene del hondón de tu ser. Nunca es erróneo. Debes comprender esto antes de que sigamos con esos sutras.
Osho- And The Buddha Said
Disertaciones sobre el
"Sutra de los 42 Capítulos"
Capítulo 3, Permaneced Por Tanto Atentos

Pàgs.45,46

sábado, 29 de octubre de 2011

Osho: "La fuerza de la retribución se irá agotando de forma gradual...

"La fuerza de la retribución se irá agotando de forma gradual de igual manera que una enfermedad... va perdiendo de forma gradual su perniciosa infuencia cuando el paciente transpira".

Imagina que alguien se ha pasado bebiendo. ¿Qué puedes hacer? Puedes darle un baño caliente o meterle en un baño. Si transpira, el alcohol se irá con la transpiración.
El Buda dice que los actos virtuosos son como la transpiración. Tus hábitos inconscientes se evaporan con ella. Por eso, no hacer el mal es de hecho hacer el bien. No te intereses negativamente, sé positivo. Si te sientas y empiezas a pensar en todo lo malo que has hecho, pensando demasiado en todo ello, estarás alimentándolo. Prestar atención es alimentar, prestar atención significa seguir hurgando en la herida.
Toma nota, sé consciente, medita, pero no hurgues en la herida. Si lo haces la agravarás. Empezará a sangrar. Así que no te preocupes demasiado acerca de tus cositas, porque sólo son cositas.
Me han hablado de un santo que solía autoflagelarse cada mañana, gritando: "¡Dios mío, perdóname porque he pecado!". Así siguió durante cuarenta años, y se convirtió en una persona muy respetada; se le consideraba un santo, y nadie sabía que hubiera cometido pecado alguno porque era un hombre muy virtuoso. La gente le observó durante cuarenta años, estaba en el centro de la atención, siempre estaba rodeado de gente. Cuando dormía también le rodeaba mucha gente, y nunca nadie le vio hacer nada erróneo; siempre rezaba. Pero cada mañana se autoflagelaba, y la sangre manaba de su cuerpo.
Siempre le hacían la misma pregunta: "¿Qué pecado has cometido? Dínoslo".
Pero él no abría la boca. Sólo cuando se estaba muriendo, dijo: "Ahora he de decirlo, porque anoche se me apareció Dios en el sueño y dijo: "Estás creando demasiadas expectativas. ¡Ya vale con cuarenta años! Es mejor que te lo diga, porque si no, no te permitiré entrar en el cielo. No has hecho nada malo"". De joven vio a una mujer hermosa y el deseo se manifestó en él, un deseo de aquella mujer. Ése fue el único pecado que cometiera -sólo un pensamiento-, y se había autoflagelado por ello durante cuarenta años. Incluso el mismísimo Dios tuvo que aparecérsele en un sueño: "Por favor...te lo digo porque vas a morir mañana. No te dejaré entrar en el cielo si continúas así. No has hecho ninguna barbaridad, y le estás dando demasiada importancia. No seas tan exigente".
Todos los errores son normales. ¿Cuál es el pecado tan extraordinario que has cometido? Ya se han cometido todos los pecados; no puedes descubrir ninguno nuevo, es muy difícil dar con uno nuevo. Es casi imposible ser original respecto al pecado. La gente ha cometido todo tipo de pecados durante millones de años. ¿Vas tú a encontrar uno nuevo? Es imposible, ¿qué podrías hacer? Bertrand Russell solía decir que el Dios cristiano parecía casi absurdo, porque dice que si cometes un pecado serás arojado al infierno para toda la eternidad. Pero eso es demasiado. Puedes arrojar a una persona al infierno durante cinco, diez, veinte, o cincuenta años. Si un hombre ha vivido setenta años, puedes arrojarle al infierno setenta años. Eso significaría que ha estado pecando continuamente durante setenta años, sin tomarse un respiro, sin vacaciones. Sí, puedes enviarle allí durante setenta años.
Y los cristianos sólo creen en una vida. Está bien que crean en una sola vida, ¿qué harían si no? ¡Por los pecados de una sola vida te arrojan al infierno para siempre! Piensa en los hinduistas... tantas vidas, una eternidad no bastaría.
Russell solía decir: "Cuento mis pecados -los que he cometido y también los que no he cometido, pero en los que he pensado- y no puedo imaginar cómo, a causa de cosas tan nimias, me van a arrojar al infierno para toda la eternidad, siendo torturado para siempre. Ni siquiera un magistrado muy duro podría enviarme a la cárcel más de cuatro años". Y tenía razón.
¿Qué errores puedes cometer? ¿Cuáles has cometido? No los llames pecados porque esa misma palabra está contaminada, contienen una condena. El Buda sólo los llama "agravios", actos torpes. Bonita terminología, actos torpes, actos en los que te has comportado con torpeza. Te encolerizas y dices algo poco elegante, o haces algo poco elegante... Sólo son agravios.
Osho- And The Buddha Said
Disertaciones sobre el
"Sutra de los 42 Capítulos"
Capítulo 3, Permaned Por Tanto Atentos
Págs. 56,58

jueves, 27 de octubre de 2011

Osho: Por lo general, si sois mis sannyasins la gente dirá que sois mis seguidores...

Por lo general, si sois mis sannyasins la gente dirá que sois mis seguidores. Al convertirte en sannyasin, has pasado a ser parte de mí, y ya no eres un seguidor. Antes de hacerte sannyasin puedes haber sido un seguidor. Luego decidiste que seguir no era suficiente, que estabas listo para ir conmigo de cabeza, que estabas listo a ir conmigo allá donde yo vaya.
Ahora bien, una vez que eres sannyasin dejas de ser seguidor, formas parte de la energía que yo soy, eres uno conmigo. La gente me pregunta: "Si no tomamos sannyas, no nos ayudará? ¿Dejará de ayudarnos?". Y yo les contesto: "Ayudaré, eso no es problema, pero no podréis tomar la ayuda porque estaréis separados de mí, seguiréis en la orilla".
El río está dispuesto a llevaros al mar, ya os ha llegado su invitación, se trata de una invitación que sigue vigente, pero vosotros seguís en la orilla. ¿Qué puede hacer el río? No puedo arrebataros de la orilla. Y de ser posible, tampoco sería conveniente, porque debéis lanzaros al río por vosotros mismos. Sólo entonces hay libertad. Si sois arrebatados por el río, se os llevará a la fuerza, y eso no os ayudará. Os destruirá, porque no os ofrece libertad. ¿Cómo puede ofreceros la libertad esencial, moksha? Habría una relación cautiva desde el principio.
Así que no te arrastraré igual que hace un río crecido con la gente. Tendré que esperar. Deberás ser tú el que venga a mí; tú deberás entrar en la corriente, y formar parte de ella.
El srotapanna, o el sannyasin, son positivos. Ahora, en lugar de manifestarse en él la no-verdad, surge la verdad. La no-verdad sólo era una preparación para que la verdad pudiera entrar. En lugar de no-violencia surge en él el amor, la compasión. La no-violencia era sólo una preparación. La no-violencia, la no-verdad y otros aspectos negativos son sólo medicinales.
Osho- And The Buddha Said
Disertaciones Sobre el
"Sutra de los 42 Capítulos
Capítulo 5, La Verdad Más Allá de la Magia
Pág. 98

martes, 25 de octubre de 2011

Osho: Este sutra es una indicación gradual del viaje interior. Escuchad:

Dijo el Buda:
"Es mejor alimentar a un hombre bueno que a cien malos".

¿Quién es bueno y quién es malo? ¿Cuál es la definición? El malo es quién es desconsiderado con los demás. El malo es el que utiliza a los demás y no les respeta. El malo es el que cree ser el centro del mundo y que puede utilizar a los demás. Todo parece existir para él. El malo es el que cree que las demás personas sólo son medios para su gratificación.
Guarda esta definición en la mente porque por lo general sueles pensar que el malo es el criminal. El malo puede no ser un criminal: no todas las malas personas son criminales. Todos los criminales son malos, pero no todas las malas personas son criminales. Unas cuantas son jueces, y otra gente muy respetable, y unos cuantos son políticos, presidentes y primeros ministros, e incluso los hay que pasan por santos.
Así que cuando hablemos de este sutra, hay que recordar la definición de qué es una mala persona. El Buda dice que un hombre malo es quien no tiene consideración por los demás. Sólo piensa en sí mismo, cree ser el centro de la existencia y siente que toda la existencia está a su servicio. Se cree autorizado para sacrificar a todos en provecho de sí mismo. Puede no ser malo normalmente, pero si tiene esa actitud, entonces es una mala persona.
¿Quién es buena persona? Justo lo contrario de la mala: quien es considerado con los demás, quien respeta a los demás tanto como a sí mismo, y quien no pretende de ningún modo ser el centro del mundo, sino que ha sentido que todos son el centro del mundo. El mundo es uno, pero existen millones de centros. Es muy respetuoso. Nunca utiliza a los demás. Los demás son un fin en sí mismos. Su reverencia es enorme.
Observa, observa tu propia vida. ¿Estás utilizando a tu esposa para tu sexualidad? Puede que no vayas de prostitutas. Por lo general crees que quien va de prostitutas es malo; ésa es una definición muy basta. Si utilizas a tu esposa como objeto sexual, entonces eres tan malo como cualquiera. La única diferencia entre ti y quien utiliza una prostituta es que tú dispones de una permanente, que tu matrimonio es un arreglo permanente de ese tipo y que el otro debe llegar a un acuerdo día a día. Tú tienes un coche en el garaje y él utiliza taxis.
Si no respetas a tu esposa, entonces es una prostituta, porque no la respetas por ella misma. ¿Qué quiere esto decir? Quiere decir que si no tiene ganas de hacer el amor, tú no la obligarás; no dirás: "Soy tu esposo y tengo derechos, derechos legales...". No, tú respetarás. Tú respetarás su intención. Está bien si ambos estáis de acuerdo. Si la otra parte no está de acuerdo, entonces la obligarás. No citarás las escrituras diciendo que una esposa ha de sacrificarse por el esposo, no dirás que una esposa ha de creer en su marido como si éste fuese Dios. Todo eso no son sino tonterías, un viaje del ego masculino.
Si una mujer utiliza a su esposo sólo por motivos económicos, como por seguridad financiera, entonces se trata de prostitución. ¿Por qué condenas a una prostituta? Porque vende su cuerpo por dinero. Pero si una esposa sólo piensa en hacer el amor con su marido porque éste tiene dinero y con él se siente segura y el futuro no le parece tan incierto, si va con él sin sentir amor en su corazón y se acuesta con ese hombre, entonces se está prostituyendo. En su cabeza, el esposo no vale más que el dinero que tiene, que su cuenta bancaria.
Osho- And The Buddha Said
Disertaciones sobre
"El Sutra de los 42 Capítulos"
Capítulo 5, La Verdad Más Allá de la Magia
Págs. 93,94

sábado, 22 de octubre de 2011

Osho-Entrando por la Brecha

¿Qué es la meditación?

"La meditación no es un método hindú; no es tan sólo una técnica. No puedes aprenderla. Es un producto: un producto de tu vivir total, que surge de tu vivir total. La meditación no es algo que puedas agregar a lo que tú eres. Es algo que puede llegar a ti sólo a través de una transformación básica, una mutación. Es un florecimiento, un producto. Un producto siempre surge del total; no es un agregado. Debes evolucionar hacia la meditación.

Este florecimiento total de la personalidad es algo que debe ser correctamente comprendido. De otro modo, nos engañamos a nosotros mismos, nos entretenemos con trucos mentales. ¡Y hay tantos trucos! No sólo puedes engañarte con ellos, no sólo no ganarás nada, sino que te harán daño, en realidad. La sola idea de que existe alguna treta para llegar a la meditación -concebirla como un método está básicamente equivocada. Y cuando uno comienza a jugar con artimañas mentales, la cualidad esencial de la mente comienza a deteriorarse.

La mente, tal como existe, no es meditativa. La mente debe cambiar completamente antes de que la meditación tenga lugar. Entonces, ¿qué es la mente en su estado, actual? ¿Cómo funciona? .

La mente siempre está verbalizando. Puedes conocer pala¬bras, puedes conocer el lenguaje, puedes conocer la estructura conceptual del pensamiento, pero eso no es pensar. Al contrario: es una forma de huir del pensar. Ves una flor y la verbalizas; ves un hombre cruzando la calle y lo verbalizas. La mente puede transformar en palabras cualquier cosa existencial. Entonces, las palabras se transforman en una barrera, una prisión. Esta constante transformación de cosas en palabras, de la existencia en palabras, es el obstáculo que se presenta en el camino hacia una mente meditativa.

Así es que el primer requisito para alcanzar una mente meditativa es estar consciente de tu constante verbalización, y ser capaz de detenerla. Tan sólo vean las cosas; no verbalicen. Tomen conciencia de su presencia, pero no las transformen en palabras. Dejen que las cosas sean, sin lenguaje; dejen que las personas sean, sin lenguaje; dejen que las situaciones sean, sin lenguaje. No es algo imposible; es algo natural. Es la situación presente la que es artificial; sin embargo, nos hemos acostumbrado tanto a ella, se ha transformado en algo tan automático, que ni siquiera nos damos cuenta de que estamos constantemente transformando la experiencia en palabras.

La alborada está ahí. Nunca te das cuenta de la distancia que hay entre verla y verbalizar acerca de ella. Ves el sol, lo sientes, e inmediatamente lo verbalizas. La brecha entre ver y verbalizar ha desaparecido. Debemos tomar conciencia del hecho de que la alborada no es una palabra. Es un hecho, una presencia. La mente transforma automáticamente las experiencias en palabras. Estas palabras llegan, así, a entorpecer tu vivencia de la experiencia.

Meditar significa vivir sin palabras, vivir en forma no-lingüís¬tica. A veces, esto ocurre espontáneamente. Cuando estás enamorado, sientes la presencia, no el lenguaje. Cada vez que dos amantes se encuentran en forma íntima, dejan de hablar. No es que no haya nada que expresar. Al contrario, hay una enorme cantidad de cosas que expresar. Pero las palabras nunca aparecen; no podrían. Las palabras llegan sólo cuando el amor se ha ido.

Si dos amantes nunca callan, significa que el amor ha muerto. Ahora están llenando la brecha con palabras. Cuando el amor está vivo, las palabras están ausentes, porque la sola existencia del amor es algo tan abrumador, tan penetrante, que se supera la barrera del lenguaje y las palabras. Y, en general, esta barrera sólo se supera a través del amor.

La meditación es la culminación del amor; no el amor referido a una sola persona, sino que a toda la existencia. Para mí, la meditación es una relación viva con el total de la existencia que te rodea. Si puedes amar cualquier situación, estás en un estado de meditación.

Y esto no es una treta mental. No es un método para aquietar la mente. Más bien, necesita de una comprensión profunda del mecanismo de la mente. Apenas comprendes tu hábito mecánico de verbalizar, de transformar la existencia en palabras, creas una brecha. Surge en forma espontánea. La brecha sigue a la comprensión, como una sombra.

El verdadero problema no consiste en cómo alcanzar el estado de meditación, sino en saber por qué no estás en ese estado. El proceso mismo de la meditación es negativo. No consiste en agregarte algo, sino que en anular algo que ya te fue agregado.

La sociedad no puede existir sin el lenguaje; lo necesita. Pero la existencia no lo necesita. No estoy diciendo que debas eliminar el lenguaje de tu vida. Tendrás que utilizarlo. Pero debes tener la capacidad de conectar y desconectar el mecanismo de la verbalización. Cuando existes como ser social, necesitas el mecanismo del lenguaje; sin embargo, cuando te encuentras solo con la existencia, debes ser capaz de desconectarlo. Si no puedes desconectarlo -sigue y sigue, y eres incapaz de detenerlo- te has transformado en su esclavo. La mente debe ser un instrumento, y no el amo. Cuando la mente es el amo, tenemos un estado en que la meditación está ausente. Cuando tú eres el amo, tu conciencia te lleva de la mano y te encuentras en estado de meditación. Así, entonces, la meditación significa transformarse en el amo del mecanismo de la mente.

La mente y su funcionamiento lingüístico no es lo esencial. Tú la trasciendes; la existencia la trasciende. La conciencia trasciende la lingüística; la existencia trasciende la lingüística. Cuando conciencia y existencia se unen, comparten una comunión. Esta comunión es la meditación.

Debemos dejar de lado el lenguaje. No quiero decir que deban suprimido o eliminarlo. Sólo quiero decir que no debe ser un hábito que les ocupe durante las veinticuatro horas del día. Cuando caminas, debes mover las piernas. Sin embargo, si siguen moviéndose cuando estás sentado, significa que estás loco. Debes poder inmovilizarlas. Del mismo modo, no debieras utilizar el lenguaje si no estás hablando con alguien. Es una técnica para comunicarse. Cuando no te estás comunicando, el lenguaje no debiera estar presente.

Si eres capaz de hacer esto, puedes cultivar la meditación. La meditación es un proceso creciente, no una técnica. Una técnica está siempre muerta y, por lo tanto, puede serle agregada a una persona; pero un proceso es siempre algo vivo. Un proceso crece, se expande.

Necesitamos el lenguaje, pero no debemos estar siempre con él. Debe haber momentos en que no haya verbalización, en que sólo existes. No es que estés vegetando. La conciencia está ahí. Y se encuentra más penetrante, más viva, porque el lenguaje la embota. El lenguaje se halla condenado a ser repetitivo; y, por tanto, produce aburrimiento. Mientras más importante sea el lenguaje para ti, más aburrido estarás.

La existencia nunca se repite. Toda rosa es una rosa nueva, enteramente nueva. Nunca ha sido antes, ni tampoco será nuevamente. Pero cuando la llamamos "rosa", la palabra "rosa" es una repetición. Siempre ha estado ahí, y siempre lo estará. Has matado lo nuevo con una palabra vieja.

La existencia siempre es joven, Y el lenguaje siempre es viejo. Por medio del lenguaje, huyes de la existencia, huyes de la vida, porque el lenguaje está muerto. Mientras más te comprome¬tas con el lenguaje, más muerto estarás. Un pundit ( cierto tipo de sabio indio) está totalmente muerto, porque sólo es lenguaje, palabras.

Sartre tituló “Palabras" a. su autobiografía. Vivimos en las palabras. Esto es, no vivimos. Al final, sólo hay una cantidad de palabras acumuladas, Y nada más. Las palabras son como fotografías. Ves algo que está vivo y le tomas una foto. La fotografía está muerta. Entonces haces un álbum de fotografías muertas. Una persona que no ha vivido en estado de meditación es como un álbum muerto Sólo tiene fotografías verbales, sólo recuerdos. Nada ha sido vivido, todo ha sido solamente verbalizado.

Meditar significa vivir totalmente; pero sólo puedes vivir en forma total cuando permaneces en silencio. Con "estar en silencio" no me refiero a estar inconsciente. Puedes estar en silencio e inconsciente, pero no es un silencio viviente. Te has equivocado nuevamente.

Te puedes autohipnotizar por medio de los mantras. Puedes producir tal aburrimiento en tu mente con sólo repetir una palabra, que la mente se irá a dormir. Caes en el sueño, en la inconciencia. Si cantas "Ram, Ram, Ram", la mente se dormirá. Entonces, la barrera del lenguaje habrá desaparecido, pero estarás inconsciente.

Meditar significa que el lenguaje no está, ahí, pero en un estado consciente. De otro modo, no hay comunión con la existencia, con todo lo que existe. Ningún mantra puede ser de ayuda, ningún cántico puede serio. La autohipnosis no es meditación. Al contrario, estar en estado de autohipnosis es una regresión. Con ello, no estás trascendiendo el lenguaje; caes a un estado aún más bajo.

Por tanto, abandonen todos los mantras, abandonen todas esas técnicas. Permitan que existan momentos en que no haya palabras. No puedes deshacerte de las palabras con un mantra, porque este proceso utiliza palabras. No puedes eliminar el lenguaje con palabras; es imposible.

¿Qué debemos hacer entonces? En realidad, no puedes hacer absolutamente nada, salvo comprender. Cualquier cosa que puedas hacer, surgirá únicamente de tu situación actual. Te encuentras confundido, no vives en estado de meditación, tu mente no está silente, de modo que cualquier cosa que provenga de ti sólo creará más confusión. Todo lo que puedes hacer en este momento es comenzar a darte cuenta del modo como funciona la mente. Eso es todo: sólo darte cuenta. Tomar conciencia no guarda ninguna relación con palabras. Es un acto existencial, no un acto mental.

Así es que lo primero es estar consciente. Estar consciente de tus procesos mentales, del modo como funciona tu mente. Apenas tomas conciencia del funcionamiento de tu mente, dejas de ser la mente. La sola conciencia significa que te encuentras más allá: lejano, un testigo. Y, mientras más consciente estás, mayor será tu capacidad para ver. Las brechas entre la experiencia y las palabras. Las brechas están ahí, pero estás tan poco consciente que nunca las ves.

Entre dos palabras siempre hay una brecha, aun cuando imperceptible, aun cuando pequeña. De otro modo, las dos palabras no estarían separadas; serían una sola. Entre dos notas musicales siempre hay una brecha, un silencio. Dos palabras o dos notas no pueden ser dos, a menos que exista un intervalo entre ambas. Siempre hay un silencio ahí; pero, para sentido, uno debe estar realmente consciente, realmente atento.

Mientras más alerta estás, más se lentifica la mente. Es siempre algo relativo. Mientras menos consciente estés, más rápida es la mente; mientras más consciente estás, más lento es el proceso mental. Cuando estás más consciente de la mente, ésta se lentifica y se amplían las brechas existentes entre los pensamien¬tos. Entonces puedes verlas: Es igual que una película. Cuando el proyector se hace funcionar en cámara lenta, ves los espacios entremedio. Una película de mi acto de levantada mano tendrá mil fragmentos. Cada fragmento será una fotografía separada. Si estas miles de fotografías corren frente a tus ojos tan rápidamen¬te que no puedas ver los espacios, ves la mano que se levanta como un proceso. Pero en cámara lenta, puedes ver los espacios.

La mente es igual que una película. Los espacios están ahí. Mientras más atento estés a tu mente, más los verás. Es como una imagen guestáltica: una imagen que contiene dos imágenes diferentes al mismo tiempo. Puedes ver una imagen o la otra, pero no las dos al mismo tiempo. Puede ser el retrato de una anciana y, al mismo tiempo, el de una joven. Pero si te centras en una, no verás a la otra; y, cuando te centras en la otra, pierdes de vista a la primera. Aun sabiendo perfectamente bien que has visto ambas imágenes, no puedes verlas simultáneamente.

Lo mismo ocurre con la mente. Si ves las palabras, no puedes ver los espacios; y si ves los espacios, no puedes ver las palabras. A cada palabra sucede un espacio, y a cada brecha sigue una palabra; pero no puedes verlas a las dos a la vez. Si te centras en los espacios, perderás de vista las palabras, serás impelido hacia la meditación.

Una conciencia focalizada sólo en palabras, es no-meditativa, y una conciencia centrada sólo en los espacios es meditativa. Cuando sea que tomes conciencia de los espacios, perderás las palabras. Si observas cuidadosamente, no encontrarás palabras: sólo encontrarás un espacio vacío.

Puedes ver la diferencia entre dos palabras, pero no la diferencia entre dos espacios. Las palabras están siempre en plural y el espacio es siempre singular: “el” espacio. Se fusionan y convierten en uno solo. Meditar es concentrarse en el espacio, en la brecha. Entonces toda la guestalt cambia.

Debemos comprender otra cosa. Si miras la imagen guestáltica y te concentras en la anciana, no puedes ver el otro retrato. Pero si sigues concentrándote en la anciana -si sigues concentra¬do en ella, si le prestas toda tu atención- llegará el momento en que el foco cambie, y repentinamente la anciana habrá desapare¬cido, y ahí tenemos al otro retrato.

¿Por qué ocurre esto? Ocurre porque la mente no puede permanecer focalizada durante mucho rato. Debe variar de lo contrario se duerme. Estas son las únicas dos posibilidades. Si te concentras, en una sola cosa, la mente se dormirá. No puede permanecer estable: es un proceso viviente. Si dejas que se aburra, se irá a dormir, huyendo de la paralización de tu foco. Entonces puede seguir viviendo en los sueños.

Esta es la meditación del tipo Mahesh yogi. Es pacífica, refrescante, puede ser útil para tu salud física y tu equilibrio mental, pero no es meditación. Lo mismo puede lograrse con autohipnosis. La palabra hindú mantra significa sugestión, nada más. Confundir esto con meditación es un grave error. No lo es. Y si la consideras como tal, nunca buscarás la verdadera meditación. Ese es el verdadero daño que producen tales prácticas y los que las promulgan. Es tan sólo una droga sicológica.

Así, entonces, no utilices ningún mantra para ahuyentar las palabras. Sólo toma conciencia de ellas, y la atención de tu mente se desplazará automáticamente hacia los espacios entre una y otra.

Si te identificas con las palabras, saltarás de una palabra a otra, y pasarás por alto los espacios. Otra palabra es algo nuevo en lo cual focalizar la atención. La mente varía a cada instante; el foco varía. Pero si no te identificas con las palabras, si eres sólo un testigo -lejano, sólo observando como las palabras se suceden unas a otras- toda tu atención cambiará, y tomarás conciencia de la brecha. Es igual que si miras pasar a la gente en la calle. Una persona ya pasó y la siguiente aún no. Hay un intervalo; la calle está vacía. Si estás mirando, conocerás este intervalo vacío.

Y una vez que conoces el espacio vacío, estás en él; has saltado a su interior. Es un abismo -da tanta paz, crea tanta conciencia- Permanecer en esta brecha es meditación, es transformación. Ahora ya no necesitas el lenguaje: te deshaces de él. Lo abandonas conscientemente. Estás consciente del silencio, del infinito silencio. Eres parte de él, eres uno con él. No tomas conciencia del abismo como algo separado de ti; lo percibes como parte de ti. Sabes, pero ahora eres el saber. Observas la brecha, pero ahora el observador es el observado.

En cuanto a las palabras y pensamientos, eres un testigo aparte; las palabras son algo separado de ti. Pero cuando no hay palabras, tú eres la brecha entre ellas: consciente, sin embargo, de que lo eres. Desaparece la barrera entre tú y la brecha, entre la conciencia y la existencia. Son sólo las palabras las que constituyen la barrera. Ahora te encuentras en una situación existencial. Esto es meditación: ser uno con la existencia, estar totalmente inmerso en ella, permaneciendo consciente. Esta es la contradicción, la paradoja. Ahora has conocido una situación en la que, eres consciente, estando además inmerso en ella.

Generalmente, cuando estamos conscientes de algo, ese algo se transforma en lo otro. Si estamos identificados con algo, nos unimos con eso, pero no estamos conscientes (como en la ira o en el sexo) Nos unificamos solamente cuando estamos inconscientes.

El sexo es tan atractivo porque en él nos unificamos por un instante. Sin embargo, en ese momento estás inconsciente. Buscas la inconsciencia, porque buscas la unidad. Pero mientras más buscas la inconsciencia, más consciente te pones. Entonces, no sentirás el éxtasis del sexo, porque el éxtasis surgía de la inconsciencia.

Podías ser inconsciente en un momento de pasión. Tu conciencia declina. Por un instante, estabas en el abismo, pero inconsciente. Pero mientras más lo buscas más se te escabulle. Finalmente, llega un momento en que tienes sexo y el momento de inconciencia ya no se presenta. El abismo se ha perdido, el éxtasis se ha perdido. Entonces, el acto resulta estúpido Es sólo una descarga mecánica; ya no le queda nada espiritual.

Sólo hemos conocido la unidad inconsciente; nunca hemos conocido la unidad consciente. La meditación es unidad cons¬ciente. Es el otro polo de la sexualidad. El sexo es uno de los polos (unidad inconsciente) Y la meditación es el otro (unidad consciente) El sexo es el punto más, bajo de la unidad, y la meditaci6n es el cenit, el punto más alto de ella. El grado de conciencia marca la diferencia entre ambas.

La mente occidental piensa ahora en la meditación porque el sexo ha perdido su atractivo. Cuando quiera que una sociedad deja de reprimir al sexo, surge la meditación, porque la desinhibición del sexo mata su encanto y su romanticismo: matará su lado espiritual. En un medio tal, el sexo se practica intensamente; pero ya no es posible hacerla en forma incons¬ciente.

Una sociedad sexualmente reprimida puede mantener su interés en el sexo; pero una sociedad no-represiva, desinhibida, no puede mantenerlo para siempre. Es algo que deberán trascender. Así es que si una sociedad es sexualmente libre, pronto surge la meditación. Una sociedad libre en el sexo es, para mí, el primer paso hacia la búsqueda.

Pero, por supuesto, la búsqueda puede ser explotada. Se le está explotando en el Oriente. Pueden suministrar gurús; pueden exportarlos. Y se les está exportando. Pero sólo se pueden aprender trucos con estos gurús. La comprensión surge al vivir la vida. No puede ser entregada, transferida.

No puedo entregarles mi comprensión. Puedo hablarles de ella, pero no puedo entregársela. Ustedes tendrán que encontrar¬la. Deberán ir al encuentro de la vida. Deberán equivocarse; deberán fracasar; deberán soportar muchas frustraciones. Pero sólo a través de los fracasos, los errores y las frustraciones, sólo encontrando la verdadera vida, llegarán a la meditación. Este es el motivo por el cual digo que la meditación es un fruto, un producto.

Hay algo que debemos comprender, pero la comprensión que obtenemos de otro nunca podrá superar el nivel intelectual. Por esto Krishnamurti pide lo imposible. Él dice, "No me comprendan intelectualmente" pero de otra persona sólo podemos obtener comprensión intelectual. Ese es el motivo por el cual el esfuerzo de Krishnamurti ha sido absurdo. Lo que él dice es auténtico; pero cuando requiere más que comprensión intelectual del que lo escucha, pide lo imposible. Otra persona no puede entregamos nada más.

Sin embargo, la comprensión intelectual puede bastar. Si pueden comprender intelectualmente lo que digo, también pueden comprender lo que no he dicho. Pueden también comprender los espacios silenciosos: lo que no estoy diciendo, lo que no puedo decir. La primera comprensi6n será inevitablemen¬te intelectual, porque el intelecto es la puerta. No podrá nunca ser espiritual. La espiritualidad es el santuario interno.

Sólo puedo comunicarme con ustedes en forma intelectual. Si realmente pueden comprenderlo, podrán también sentir lo que no he dicho. No puedo comunicarme sin palabras; pero cuando utilizo palabras, estoy también utilizando los silencios. Tendrán que estar atentos a ambos. Si sólo comprenden las palabras, tendremos una comunicación; pero si también pueden tomar conciencia de los espacios entre ellas, tendremos una comunión.

Debemos comenzar de alguna forma. Todo comienzo está destinado a ser un paso en falso, pero debemos comenzar. Al equivocarnos, al explorar a tientas, encontramos la puerta. El que piense comenzar sólo cuando tenga la, forma correcta de hacerla, nunca dará el paso inicial. Aún un paso en falso es un paso en la dirección correcta, porque es un paso, un comienzo. Comienzas a tentar en la oscuridad y buscando a tientas encuentras la puerta.

Es por eso que les digo que estén atentos al proceso lingüístico -el proceso de las palabras- y que busquen tomar conciencia de las brechas, de los intervalos. Habrá momentos en que, sin hacer un esfuerzo consciente, tomarán conciencia de los intervalos. Ese es el encuentro con lo divino, el encuentro con lo existencial.

Cuando quiera que tengas un encuentro, no huyas, Permane¬ce allí. Tendrás miedo al principio; eso es inevitable. Cada vez que te encuentras con lo desconocido, surge el miedo, porque para nosotros, lo desconocido es la muerte. Así es que cada vez que encuentres un intervalo vacío, sentirás que la muerte se te acerca. Entonces ¡muérete! Permanece en eso, y muere por completo en esa brecha. Y tendrás un renacer. Muriendo tu muerte en silencio, la vida resucita. Estarás vivo por primera vez, realmente vivo.

Así es que para mí, la meditación no es un método, sino un proceso; la meditación no es una técnica, sino que una comprensión. No puede enseñada; sólo se puede indicar en su dirección. No puedes informarte acerca de ella, porque ninguna información es realmente información. Viene del exterior y la meditación surge de tus propias profundidades internas.

¬ Así, entonces, busca, sé un buscador y no un discípulo. Así, no serás el discípulo de algún gurú, sino que un discípulo de la vida entera. Entonces, no estarás solamente aprendiendo palabras. El aprendizaje espiritual no puede provenir de las palabras, sino que de las brechas, de los silencios que siempre te rodean. Están ahí, incluso en medio de la muchedumbre, en el mercado, en el bazar. Busca los silencios, busca los espacios vacíos, dentro y afuera, y un día te encontrarás meditando.

La meditación viene hacia ti. Es siempre ella la que se acerca; no puedes traerla Pero uno debe estarla buscando, porque sólo cuando la estás buscando estarás abierta ella, vulnerable a ella. Eres su anfitrión. La meditación es un invitado. Puedes invitarla y esperarla. Va al encuentro del Buda, va al encuentro de Jesús, se acerca a todos los que están listos, receptivos, buscando.

Pero no intentes aprenderla de alguien; serás engañado si lo haces. La mente siempre busca lo más fácil. Este es el origen de la explotación. Entonces vienen los gurús y toda su cosa, y la vida espiritual se envenena.

La persona más peligrosa es la que explota la premura espiritual. Si alguien te roba tu dinero no es tan grave, si alguien te falla no es tan grave; Sin embargo, si en tu camino hacia la meditación, hacia lo divino, hacia el éxtasis, alguien te engaña o te desvía de tu senda de una u otra forma, el pecado es grande e imperdonable.

Pero eso se está haciendo. Así es que estén alertas y no le pregunten a cualquiera, "¿Qué es la meditación? ¿Cómo debo meditar?" En lugar de eso, pregunta cuáles son las cortapisas, cuáles son los obstáculos. Pregunta por qué no estamos siempre en estado meditativo, dónde se detuvo el crecimiento, dónde fuimos mutilados. Y no busques gurús, porque los gurús son mutiladores. Cualquiera que te dé fórmulas hechas no es un amigo, sino un enemigo.

Busca a tientas en la oscuridad. Nada más puedes hacer. La búsqueda misma se transformará en la comprensión que te liberará de la oscuridad. Jesús dijo: "La verdad es libertad". Comprende esta libertad. La verdad siempre viene a través de comprensión. No es algo con lo que te encuentras; es algo en lo cual evolucionas. Así es que busca la comprensión, porque mientras, más comprendas, más te acercarás a la verdad. Y en algún momento desconocido, inesperado, impredecible, cuando la comprensión llegue a su clímax, te encontrarás en el abismo. Ya no eres: sólo la meditación es.

Cuando ya no eres, estás meditando. La meditación no es algo agregado a ti; está siempre más allá de ti. Cuando estás en el abismo, la meditación está allí. Entonces el ego no es; ya no eres. Sólo el ser es. A eso se refieren las religiones cuando mencionan a Dios: el ser supremo. Es la esencia de todas las religiones, de todas las búsquedas, pero nunca la encontrarás empaquetada y lista. Así es que tengan cuidado de cualquiera que presuma acerca de ella.

Sigue buscando a tientas, y no le temas al fracaso. Admite los fracasos, pero no cometas los mismos de nuevo. Una vez basta; eso es suficiente. El que se extravía una y otra vez en la búsqueda de la verdad es siempre perdonado. Esta es una promesa que proviene de las profundidades mismas de la existencia.
Osho-Sicología de lo Esotérico

viernes, 21 de octubre de 2011

Osho- La meditación te ayuda a cultivar tu propia facultad intuitiva

Se vuelve muy claro lo que va a satisfacerte, lo que va a ayudarte a florecer... cualquier cosa que sea... y va a ser diferente para cada individuo.
Ése es el significado de la palabra "individuo": todos son únicos. Y buscar e indagar en tu condición de ser único es una gran emoción, una gran aventura.
Tu pregunta es significativa de muchas maneras más también, porque no es solamente cuestión de encontrar lo esencial en el individuo. En la vida también estamos cargados con lo no-esencial, en la religión también, en toda dimensión.
La persona religiosa sigue haciendo ciertos rituales que le son enseñados por otros. Nunca encuenra su propia religiosidad, una cualidad que no te puede ser impuesta, una cualidad que sólo se puede ayudar a que crezca en ti. No es como una flor de plástico que te puede ser dada desde afuera por el sacerdote. Es una rosa real y para eso tienes que estar muy alerta, muy consciente.
El cristiano va a la iglesia todos los domingos. Es una formalidad que no lo hace religioso, pero le da un falso sentido de religiosidad. El hindú sigue recitando el Gita, no lo hace religioso para nada, al contrario, lo impide, porque al recitar el Gita se vuelve una persona de mucho conocimiento. Se vuelve un loro o una computadora. Puede recitar el Gita entero pero no entiende nada porque no ha experimentado nada. Conoce las palabras pero no ha encontrado el significado de esas palabras.
La gente sigue siendo imitadora.
Por ejemplo, Mahavira vivía desnudo; ésa era su individualidad. No se espera ni se supone que ninguna persona viva desnuda, a menos que uno encuentre que ésa es una visión interior, intuitiva, a menos que uno encuentre que ésa es la única manera en que puede ser verdadero con su propio yo. Entonces es otra cuestión. Pero el monje jaina practica el nudismo. Simplemente una imitación, una copia al carbónico. Y recuerda, la imitación es siempre fea porque crea una persona falsa, nunca te da autenticidad.
Mahavira estaba desnudo no porque nadie le hubiera dicho que estuviera desnudo; sentía la necesidad inmensa de ser simplemente como un niño y él oyó su necesidad, y sufrió por esta necesidad. Se lo perseguía de un pueblo a otro, se arrojaron perros salvajes para que lo corrieran de un pueblo a otro, le arrojaron piedras, porque la gente pensó que estaba destruyendo su moralidad, que era un hombre peligroso.
En un país ortodoxo como la India de hace veinticinco siglos, un hombre caminando desnudo debe haber sido por cierto una molestia para la gente, para su manera convencional de vivir, para su estilo tradicional de pensar. Krishna no ha vivido desnudo, Rama no ha vivido desnudo, ningún avatar hindú ha vivido desnudo. Este hombre estaba destruyendo toda la tradición, la cultura, la religión. Por supuesto tenía que ser castigado.
Pero Mahavira era inmensamente feliz. El monje jaina no parece ser feliz en absoluto porque él es simplemente una imitación. En realidad se está torturando a sí mismo, obligándose a sí mismo a estar desnudo, porque en su mente ahora ha surgido la ambición: a menos que se parezca a Mahavira no va a lograr la liberación última. Ahora la desnudez se ha convertido en una cosa esencial, lo cual no es. La desnudez no es una cosa esencial. Buda lo logró sin estar desnudo, Jesús lo logró sin estar desnudo, tú puedes lograrlo. Y yo no estoy diciendo que Mahavira no lo logró por estar desnudo. Lo logró, logró la iluminación, pero éstas son cosas individuales.
Osho- Desiderata
Guía Espiritual
Capítulo Volviéndose Esencial.
Págs. 43,45

martes, 11 de octubre de 2011

From – OSHO WORK Team, Pune. INDIA

Osho Ashram is on final countdown of transfer its properties by the way of gift development sell in dubious manner in Pune (Poona). This process is initiated by the present trustees of the Osho International Foundation, bea ...ring registration no. F 14570 of Mumbai. This trust is holder of properties of Osho Ashram at Pune, Maharashtra, India

We have filed an application in the court of Honorabl ...e itable Commissioner at Mumbai in order to investigate an application being filed by the said Osho International Foundation trust. Our purpose for this objection is to Save Osho Premise at Pune.

We need your support and vote. Please visit http://www.oshowork.org/ for details.

From – OSHO WORK Team, Pune. INDIA

Please Forward This Letter To All Osho Sannyasins and Lovers....Ver más
OshoWorks.org



miércoles, 14 de septiembre de 2011

Osho: El sueño tiene que ser roto; ...



El sueño tiene que ser roto; y cuando el sueño se rompe, no hay nadie
despierto; solo hay allí despertar. No hay nadie iluminado, solo hay
iluminación. Una persona iluminada no puede decir "Yo"; incluso si tiene que
utilizar la palabra es solo algo verbal, hay que urilizarla por culpa de la
sociedad. Es solo una regla del idioma. De otra manera él no tiene un
sentido del "Yo".
El mundo de los objetivos desaparece, y entonces, ¿qué sucede? Cuando el
mundo de los objetos desaparece, tu apego a las cosas desaparece, tu
obsesión por las cosas desaparece. No es que las cosas desaparecezcan ellas
mismas; por el contrario, las cosas por primera vez aparecen tal como son.
Entonces no estás aferándote, obsesionado; entonces no estás coloreando la
realidad con tus propios deseos, con tus propias esperanzas y frustraciones.
Entonces el mundo no es una patalla en donde proyectar tus deseos. Cuando
dejas caer tus deseos, el mundo sigue allí, pero es un mundo totalmente
nuevo. ¡Es tan fresco, está tan lleno de color, es tan bello! Pero una
mente apegada a los objetos no puede ver porque sus ojos están cegados por
el apego.
Cuando la mente desaparece, cuando los pensamientos desaparecen, surge un
mundo totalmente nuevo. No es que te conviertas en un despreocupado; al
contrario, te vuelves más atento. Buda utiliza el término "correcta atención
. Haces cosas, te mueves, trabajas, comes, duermes pero siempre atento. La
mente ya no está ahí, pero sí la atención. ¿Qué es la atención? Es
consciencia. Es conscicencia perfecta.

Osho- La Baraja del Buda.
El Dhammapada de Gautama El Buda.
Carta 2

viernes, 19 de agosto de 2011

Osho. Tienes que caminar en la vida...



y ver cómo te caes; tienes que mirarte y observar cómo te vas por el camino equivocado. Y la mente insistirá en ir hasta el extremo mismo. Toda vez que sientas un desequilibrio, equilíbralo inmediatamente y yéndote al opuesto.

Osho- Tao los Tres Tesoros Vol. I

lunes, 11 de julio de 2011

Osho: Con una máscara, sólo te encontrarás con otras máscaras...

Con una máscara, sólo te encontrarás con otras máscaras. Con una máscara, nunca podrá existir ningún diálogo con la realidad.
Con una máscara, permaneces en la relación entre el "yo" y el "eso". La realidad permanece detrás. Cuando desaparece la más­cara y has regresado a casa, ocurre una tremenda transformación. La relación con la realidad ya no es de "yo-eso" es la de "yo-tú" Ese "tú" es la divinidad.
La realidad adquiere una personalidad: tú aquí vuelves a la vida, la realidad allí vuelve a la vida. Siempre ha estado viva, sólo tú estabas muerto. Es como si hubieras tomado cloroformo: cuando regresas, y la influencia del cloroformo va desaparecien­do poco a poco, ¿cómo te sientes? Es una hermosa experiencia. Si nunca has estado en una mesa de operaciones, ve, ¡sólo por la experiencia! Durante unos instantes estás completamente en ninguna parte, y entonces emerge la consciencia. De repente, todo está vivo, nuevo. Estás saliendo del útero. Sucede exactamente lo mismo cuando decides vivir una vida auténtica. Entonces, por primera vez, entiendes que ahora has nacido. Hace sólo un mo­mento estabas pensando y soñando que estabas vivo, pero no lo estabas.
Osho- Música Ancestral en los Pinos
Pág. 56

jueves, 23 de junio de 2011

Osho: Pasado, futuro -tú estás conectado-,...

Pasado, futuro –tú estás conectado-, ésta es la dimensión del tiempo. Y luego, en el espacio tú estás conectado con todo. Esos árboles, el sol, la luna, las estrellas… estás conectado con todo. Si el sol deja de existir o se enfría, como un día tiene que suceder, porque la energía se está disipando cada día… cuando se enfríe el sol, todos nos enfriaremos inmediatamente. Perderemos vida, porque la vida necesita calor; por tanto, el sol te está dando vida continuamente. Y recuerda, en la vida no hay un proceso en una sola dirección; no puede ser. Existe el dar y el recibir: todas las vías van en dos direcciones. Si el sol te está dando vida, tú debes estar dándole vida al sol de una u otra forma.
Osho-El Sendero del Tao

martes, 21 de junio de 2011

Osho:No desperdicies tu vida,...


Osho: No desperdicies tu vida, tu energía vital, en esfuerzos por mantener la máquina enorme y ridícula de autoimportancia y productividad.

viernes, 17 de junio de 2011

Osho: El canto, la música, la danza, es el leguaje de la alegría

El canto, la música, la danza, es el lenguaje de la alegría, de la felicidad. Es la expresión de una persona que no es desgraciada. Pero puede que sea sólo en apariencia, puede que sólo sea una proyección, puede que sólo sea cultivada. En lo profundo, la situación puede ser precisamente la contraria. A veces pasa que tú sonríes porque las lágrimas acuden a tus ojos, y si no sonríes empezarán a rodar por las mejillas. A veces tú mantienes una actitud, una pose cultivada, una máscara de felicidad, porque ¿qué sentido tiene mostrarle tu infelicidad al mundo? A eso se debe que la gente parezca tan feliz. Todo el mundo piensa que él es la persona más feliz del más infeliz del mundo, porque conoce su realidad, y sólo las poses de los otros, las poses cultivadas. Por eso el mundo piensa en lo más profundo: “Soy la persona más desgraciada; además ¿por qué lo soy cuando todo el mundo se siente tan feliz?”.
Osho-El Sendero del Tao

viernes, 10 de junio de 2011

Osho: Vive donde està Dios, o donde està el todo...



Vive donde está Dios, o donde está el todo. Entonces, Dios o el todo: dondequiera que encuentres que el todo te ha colocado, quédate allí.
Osho- El Dios de Todos
Pág. 35

martes, 24 de mayo de 2011

Osho: Me gustarìa que estuvieras centrado en ti mismo...

Me gustaría que estuvieras centrado en ti mismo para que nada te perturbara, para que nada te distrajera, para que todo lo que sucediera a tu alrededor fuera como un sueño y tú permanecieras arraigado en tu ser. Y esto sólo puede ser hecho de una forma: yo he de permanecer absolutamente asentado en mí mismo; vosotros no habéis de ser una distracción. No he de tener en cuenta lo que hagáis; lo único que he de tener en cuenta es lo que mi verdadera naturaleza pueda obrar de forma espontánea.
Y sé que si mi amor no puede transformarte, tampoco lo hará mi ira, porque el amor es una fuerza superior a la ira. Si mi compasión no puede ayudarte, nada te ayudará. Cuanto más alerta estés, más lo percibirás. Eres capaz de soportar mi ira fácilmente; estás condicionado para eso. Pero no puedes soportar la compasión; lo que digo te golpea en lo más hondo y profundo.
Osho-El Verdadero Sabio

lunes, 23 de mayo de 2011

Osho: Lo màs importante, lo que hay que recordar es que una mente religiosa, un hombre...

Lo más importante, lo que hay que recordar es que una mente religiosa, un hombre religioso, un ser religioso, siempre es un proceso, él siempre se está moviendo.
Por supuesto, el movimiento no tiene una motivación. No se mueve por una meta, simplemente se mueve; el movimiento forma parte de la naturaleza de la realidad, se mueve con la realidad, como alguien dejándose llevar por la corriente en el río. Él se mueve con el río del tiempo. Él vive cada momento, y se mueve. Él no hace nada, simplemente vive el momento. Cuando el momento se ha ido, viene otro: vive el momento. Un hombre religioso tiene un principio, pero no un final; el despertar tiene un principio, pero no un final; sigue y sigue y sigue.
Con la ignorancia ocurre exactamente lo contrario: la ignorancia no tiene principio, pero tiene final. ¿Podrías decir cuándo comenzó tu ignorancia? No tiene principio. ¿Cuándo comenzó la ignorancia de Buda? No tuvo principio, pero tuvo un final. Acabó cierta noche de luna llena, hace veinticinco siglos. La ignorancia tiene un final, pero no principio; la iluminación tiene un principio, pero no final. Y así es como se completa el círculo. Cuando un hombre ignorante se ilumina, el círculo se completa.
La ignorancia no tiene principio, pero tiene un final; la iluminación tiene un principio, pero no final. Ahora el círculo está completo.
Osho-La Hierba Crece Sola

martes, 26 de abril de 2011

Osho: Cuando uno se relaja, la ansiedad, la tensiòn, la angustia,.. desaparecen.


De repente te haces vulnerable, ya no estás cerrado. De repente estás abierto, de repente te vuelves receptivo. Y esto es lo que tienes que comprender: que cuando te hayas expuesto ante los demás sólo entonces te expondrás ante ti mismo. Si te es­tás ocultando a los demás, todo lo que les estés ocultando irá des­cendiendo poco a poco al sótano de tu mente inconsciente. Los demás no lo sabrán y poco a poco tú también te olvidarás de ello.
Pero siempre que entras en la visión de un hombre perceptivo, todo es revelado. Ésta es una de las razones básicas por las que, en Oriente, la relación entre un discípulo y un maestro es tan va­lorada: porque el maestro es como un rayo de luz, como unos ra­yos X, y el discípulo queda expuesto. Y cuanto más penetra y sabe el maestro sobre del discípulo, más consciente se hace el discípulo cada vez de sus propios tesoros ocultos.
Tratando de ocultarse de los demás, se ha hecho tan experto en esconderse, que también se esconde de sí mismo.
No sabes mucho de ti mismo. Sólo conoces una parte de ti, la punta del iceberg. Tu conocimiento sobre ti mismo es muy limi­tado; no sólo limitado, ¡es casi irrelevante! Es tan parcial, es tan fragmentario que, a menos que lo pongas dentro de un contexto, con todo tu ser, no tiene sentido. Es casi un sinsentido.
Por eso continúas viviendo sin conocerte a ti mismo. ¿Y cómo puede uno vivir sin conocerse a sí mismo? Y sigues proyectando cosas en los demás que no tienen nada que ver con ellos; podrían ser fuerzas ocultas en tu interior. Pero no sabes que están ocultas en tu interior y las proyectas en los demás. Alguien te parece un egoísta: quizás eres tú el egoísta y estas proyectando. Alguien te parece muy enfadado: la rabia podría estar en tu interior y el otro no ser más que una pantalla; y eres tú el que está proyectando.
A menos que te conozcas exactamente, no serás capaz de sa­ber qué es real y qué es proyección. Y no serás capaz de saberlo de otros tampoco. El autoconocimiento se convierte en la puerta de todo el conocimiento; es su base. Sin estos cimientos todo el conocimiento es sólo aparente; en lo más profundo es ignorancia.

He escuchado una anécdota.
La señora Jones, muy preocupada, fue a consultar a un psi­quiatra:
-Mi marido -dijo-, está convencido de que es un pollo. No para de dar vueltas rascándose constantemente y duerme en una barra larga de madera que ha colocado a modo de percha.
-Ya veo -dijo el psiquiatra pensativo-. ¿Y cuánto tiempo lle­va su marido sufriendo esta fijación?
-Ahora hace casi dos años.
El psiquiatra frunció ligeramente el entrecejo y dijo:
-Pero ¿por qué ha esperado hasta ahora para buscar ayuda? La señora Jones se sonrojó y dijo:
-¡Ah, bueno, estaba tan bien tener un suministro regular de huevos!

¡Esta mujer es una neurótica! Se cree que su marido es el neu­rótico: siempre que pienses algo sobre otra persona, observa. No tengas prisa, primero mira dentro de ti. La causa podría estar en tu interior. Pero no te conoces a ti mismo y por eso sigues con­fundiendo las realidades externas con tus propias proyecciones. Es imposible conocer nada real a menos que antes te hayas cono­cido a ti mismo. Y la única manera de conocerse uno mismo es vivir una vida vulnerable, abierta. No vivas en una celda cerrada. No te ocultes detrás de tu mente, sal afuera.
Una vez que sales afuera, te irás haciendo consciente poco a poco de millones de cosas que hay en ti. No eres un apartamento de una sola habitación, tienes muchas habitaciones: eres un pala­cio. Pero te has acostumbrado a vivir en la entrada y te has olvi­dado completamente del palacio. Existen muchos tesoros ocultos en ti y estos tesoros te están constantemente llamando, invitán­dote. Pero estás casi sordo.
Hay que romper esta ceguera, esta sordera, esta insensibilidad, y nadie más que tú puede hacerlo. Si alguien ajeno a ti lo intenta, te ofenderás, sentirás que se están entrometiendo. Sucede cada día: si intento ayudarte, sientes que te he invadido. Si intento decirte algo verdadero de ti, te ofendes, te sientes humillado, te sientes he­rido, tu orgullo se hiere. Quieres escuchar cómo cuento mentiras sobre ti; quieres escuchar algo que ayude a la imagen fija que tie­nes de ti mismo. Tienes una imagen dorada de ti mismo que es fal­sa. Hay que romperla en pedazos, porque una vez desecha, la rea­lidad emergerá. Y si no acabas con ella seguirás aferrándote.
Crees que eres religioso, te crees un gran buscador: tal vez no seas religioso en absoluto, podrías sencillamente tener miedo a la vida. En tus templos y en tus iglesias, se ocultan los cobardes, con miedo a la vida. Pero aceptar que uno tiene miedo a la vida es muy humillante, por eso no dicen que tienen miedo a la vida, sino que han renunciado: «La vida no vale nada. La vida es sólo para las mentes mediocres». Han renunciado a todo por Dios; es­tán buscando a Dios. Pero observa ...están temblando. Están re­zando de rodillas, pero su oración no es de amor, su oración no es de celebración, su oración no es una fiesta; su oración nace del miedo. Y el miedo lo corrompe todo, nadie puede dirigirse a Dios a través del miedo.
Tienes que acercarte a la verdad a través de la valentía. Pero si estás escondiendo tu miedo detrás de la religiosidad, entonces será muy difícil acabar con él. Eres avaricioso, miserable, pero sigues contando que vives una vida muy sencilla. Si te estás ocul­tando tras una racionalización sobre la sencillez, entonces te será muy difícil darte cuenta de que eres un miserable. Un miserable se equivoca tremendamente porque la vida es para aquellos que comparten, la vida es para aquellos que aman, la vida es para aquellos que no están demasiado aferrados a las cosas, porque entonces se hacen disponibles a las personas.
Osho- Música Ancestral en los Pinos
pág.52

viernes, 18 de marzo de 2011

Osho: Salta al vacío...


La meditación no tiene nada que ver con la mente, la meditación significa simplemente un estado de no-mente. El funcionamiento de la mente es la alteración sólo en la meditación.
OSHO

miércoles, 19 de enero de 2011

Osho: Aquí estoy yo, soñando de nuevo el gran sueño de alumbrar un hombre nuevo...


Aquí estoy yo, soñando de nuevo el gran sueño de alumbrar un hombre nuevo. Tú eres mi esperanza. Atisha estaba esperanzado con sus discípulos de la misma manera.
Estos sutras no fueron escritos como se escribe un libro; estos sutras fueron entregados a sus discípulos para que meditaran sobre ellos.
Osho-El Libro de la Sabiduría